Buena Malicia ...

Sol de Noviembre o el disfrute de las vacaciones

Estoy siendo bien cliché en este momento: estoy sentada en mi balcón viendo la tarde pasar, observando a la gente, escribiendo esta entrada y tomandome un café. Y me siento tan tranquila... sumándole que me está dando el solecito bien rico y yo amo el solecito.
Estos días me he quejado de tener mucho tiempo libre, pero creo que no se me había ocurrido disfrutar tantito de días como hoy.
Está chido tener un descanso de vez en cuando (sin excesos) y sacarle provecho al descanso, disfrutarlo y sonreirle tantito.

A parte, Devendra me hace feliz.



Adiós :)

“Porque no es tan fácil encontrar un cómplice en la vida, alguien que te cuide, que te respete, que no te juzgue, alguien que se ría contigo, alguien que aguante vara si estás triste o te pones loca, alguien que te haga un clóset enorme para tus 150 pares de zapatos y que se aprenda las letras de tus rolas favoritas aunque sean de Timbiriche, alguien que este contigo en los momentos importantes, alguien que te defienda aunque tú te puedas defender sola, alguien que baile contigo aunque no le guste bailar, nada más porque tú se lo pediste.”

- Carla "Charly" García
Soy Tu Fan

NO SÉ COMO SENTIRME

"Golpeo el sueño con las plantas de los pies y la vida me sube por las piernas, me recorre el esqueleto, se apodera de mí, me quita la desazón y me endulza la memoria. El mundo se estremece."





Isabel Allende.

¿Y yo quién soy?

Lately

Jaja, iba a escribir una entrada de una canción de esas de "ya no te recuerdo" pero me dio hueva y risa y pensé "si lo hago es obvio que recordé" y pues no, no va por ahí.
La cosa es que hace mucho tiempo me encontré con una banda re buena, "The Helio Sequence" se llama, y hasta hace unos días, creo que ya son semanas, les puse atención a las letras de sus canciones; "Lately" habla de alguien que prácticamente aprendió a dejar ir y ya no se tortura con pensamientos de "por qué". Fue hasta escuchar esa letra que me cayó el veinte y me di cuenta de que hice eso por un buen rato, un enorme rato, más de lo que debía y... hoy ya no. Y estoy feliz.

Pero no estoy feliz por ya no hacerlo, ni tampoco soy feliz porque ya no me siento triste.
Al contrario, estoy feliz porque aprendí a manejar mi tristeza, aprendí a sentirla y aprendí a quererla.
Y aprendí que no es malo sentirse así. Y estoy feliz por eso.
Hoy hasta me siento bien bonita (y eso que en este preciso momento tengo una mascarilla en la cara que me hace ver medio ridícula).

He pasado días bien hogareños y bien bonitos. También he conocido gente bonita (por dentro y por fuera) y me he ido alejando de los que son feos por dentro. O de esos que te llaman amiga un día y al otro se les olvida tu existencia. Pero esa es otra historia que me bajonea y hoy no estoy para bajones.

Mi vida se está acomodando. Tiene sus bajos (muy bajos) y tiene sus altos. Y tiene sus recuerdos... Y me gusta :)

Twitter o del cierre de ciclos.

Ayer por la tarde cerré mi cuenta de Twitter, ahora "@Pausina" ya no existe más.
"¿Por qué?" fue la pregunta que todos me hicieron. "Me aburrió", "ya no me gustaba", "me harté", entre otras, fueron las respuestas que di.
La verdad es que me cansó hacer mi vida tan pública y perder el tiempo tan a lo pendejo, aparte de que casi nadie recordó que empecé a usar mi cuenta cuando más hundida en la depresión estaba.

La abrí hace mucho tiempo pero la empecé a usar hasta mayo de este año, la usé como desahogo y me sirvió. Aparte de que me unió con muchas personas que hoy llamo "amigos" y son de esos que están contigo cuando necesitas a alguien ahí.

Pero todo tiene un fin.
Ahora mi cuenta ya no está y es un ciclo que se cierra, un ciclo metafórico y un ciclo cibernético.
El segundo es bastante claro, pero el primero es más como un estado de mi mente.




Liberando.

Días. ("No sé")

Hoy terminé mi tercer semestre de la carrera. Ya llevo año y medio estudiando psicología y no sé qué pensar. Hoy un conocido/amigo/nosequesomos, me dijo que ayer por la tarde tuvo lo que sería su última clase como alumno universitario y me dieron ganas de ser él.

No han pasado cosas tan interesantes últimamente, me refiero a emociones fuertes. Este semestre cursé seis materias y ya excenté cuatro, ñoñeé como nunca en el semestre y me fue bastante bien, ahora descanso mientras todos están estresadísimos con sus trabajos finales y algunos exámenes. Yo no y me dan celos (¿?). No sé, realmente solo me dan ganas de hacer algo, porque no estoy haciendo nada.

Hacer nada me lleva a perder el tiempo, dormir de más, jugar de más, pendejear de más, pensar de más... Solo que esta vez mis pensamientos no me están aniquilando poco a poco, nadamás me pongo a analizarme y me doy cuenta de cosas, entre ellas que algo me falta. Algo, algo. ¿Qué? No sé. O si sé pero no lo quiero nombrar. Nombrarlo le va a dar un peso que no quiero tener. ¿O de verdad no sé? ASH.

Y para mejor terminar esa mini pelea mental, mejor pienso en otras cosas...
Por ejemplo: Este fin de semana hay una evento/actividad a nivel país que se llama "El Buen Fin", le conté a mi mamá y me dio mucho dinero para comprarme ropa. Los ojos me brillaron de felicidad o algo así, pero estoy en un error. Realmente tengo todo lo que necesito y más, mucho más. Digo, tampoco me sobra como para regalar o para vivir toda la vida, pero tener más ya solo es capricho. Me vendría bien invertir el dinero en otras cosas. Y sé qué cosas. Y eso me hace querer hacer algo para obtener dinero. Supongo que ya debo hacerlo. No sé que hacer, pero quiero hacer.

Otra cosa en la que he pensado mucho en estos días es que ya se viene navidad y yo no sé dónde esconderme para no celebrarla. La odio, es la peor época (para mí). Y no es por capricho o por dios o esas mamadas, es por mí. Por mis recuerdos, por mis cosas, por mis creencias, por mí, por mí y nadamás por mí (el año pasado escribí en este mismo blog el por qué). No sé a dónde irme o qué hacer para que no me obliguen a celebrarlo. Porque mi familia es de esas que creen que solo se vive para la navidad, guácala. A ver que me invento.

Hoy es viernes. Son las 7.10pm y yo ya me quiero dormir.
También me dan ganas de que alguien me llame y me invite a alguna fiesta o algo así, pero a la vez no. Me da flojera y codera. Creo que otra vez necesito un timeout de la fiesta y del alcohol. Hace un tiempo me propuse un mes, pero sin razones, al final me di cuenta de que solo quería llamar la atención. Hoy ni me estoy proponiendo no fiestear, nadamás no me dan ganas. Ironías, ironías...

Entre otras cosas me gusta alguien y no está bien. Porque ni me gusta tanto. Solo es guapo, inteligente y con buena ortografía. Y loco. Y raro. Y creo que lo suficientemente enfermo mental como para mí. Pero no está bien.
Además tiene zapatos feos.

Ayer me pidieron matrimonio y yo no sé qué pensar. Me dio risa. Pero no sé.


Ya no sé nada.


O igual y nadamás me hago la que no sé. Jaja. Qué cosas.

Aprender a decir que NO.

De vida. De muerte.

Hoy he hablado de la muerte al por mayor.
Hace 5 años mi abuelo falleció en la madrugada y me dejó un vacío existencial que a veces aún me duele. Es el ciclo de la vida, ya lo sé. Pero era mi abuelo, quién fungió como padre, quien fue amigo, quien fue confidente, quien me enseñó a ver la vida un poquito más centrada de lo que yo tenía en mente.

Yo tenía 14 años cuando quería comerme al mundo enterito, de una mordida. Catorce años y él se me fue. Él que era el único que sabía detenerme antes de hacer un movimiento incorrecto, el único. Él que me daba las buenas noches como si fuera mi papá. Él que estuvo más presente que mi papá. Él que era mi amigo. Él.

Y nadamás por él se me ocurrió ir a la Iglesia y escuchar la misa y estar en ese ritual extraño, nadamás por él. Porque lo extraño.
Hace 5 años que ya no está y yo siento que ha sido muy poco. Cómo pasa el tiempo...

Dice Octavio Paz que cada quién tiene la muerte que merece. Yo sé que mi abuelo su muerte mereció... ¿Cuál voy a merecer yo? Me da miedo. Me gusta la muerte, me atrae la muerte, me gusta celebrar la muerte, me gusta vivir la muerte. Pero no me quiero morir.
Si me muero, ¿quién iría a verme? ¿quién me lloraría? ¿qué de diferente habría? Lo quiero y no lo quiero saber. Me causa miedo. Le tengo miedo.
Ya lo dice el Balajú, yo le canto a la vida. A la vida siempre.



Si me muero díganle al amor de mi vida que a fin de cuentas, no me morí por él.


"El mal de amores duele, pero no mata"
-Dicho popular mexicano.

De esas veces.

Cuando quieres escribir pero no sabes que decir.

Cuando quieres tener pero no sabes qué.

Cuando quieres salir pero no tienes a dónde ir.

Cuando quieres bailar pero no encuentras lugar.

Cuando quieres fiestear pero ganas ya no te dan.

Cuando quieres hablar pero prefieres callar.

Cuando crees que nada está bien y miras alrededor para darte cuenta de tu error.

Cuando te das cuenta de que no te falta nada y que tienes más de lo que mereces.

Cuando eres feliz.

De esas veces que eres feliz.

Ya quiero salir de vacaciones. Esto harta de mi horario escolar. Y de mis aburridas clases.



Crisis existencial.